Edificio de Usos Múltiples

Frente a lo escueto del programa constructivo (salón, despacho y aseos), el programa de necesidades ajustado por el Ayuntamiento de Fuente Obejuna se plantea amplio y diverso, con una gran variedad de usos a los que tendrá que dar cabida el edificio a lo largo de su vida útil, teniendo en cuenta que se trata de prácticamente el único equipamiento de servicios no básicos de un pequeño núcleo poblacional.

El proyecto se organiza mediante espacios lo suficientemente flexibles para albergar más situaciones de las que en un primer momento se pudieran plantear y, a la vez, lo suficientemente representativos para la colectividad de la aldea. Dado lo ajustado de superficie y presupuesto disponibles, se opta por un único espacio que, a modo de gran salón, dé cabida a las necesidades colectivas, quedando relegado el resto del programa al mínimo imprescindible para su adecuado funcionamiento. El presupuesto y la buena disposición del solar en cuanto a orientaciones hacen que el sistema pasivo de climatización sea parte fundamental de la formalización de las soluciones adoptadas.

El edificio se proyecta como una pieza autónoma adosada a la única medianería construida que tiene el emplazamiento, quedando limitada en planta su geometría por los límites del solar y las servidumbres de las instalaciones urbanas que discurren por él, dando como resultado la envolvente donde se inserta el programa previsto.

Los espacios se organizan dentro del edificio del mismo modo que el edificio se instala en el solar: compactos, con los recorridos diluidos en la gran superficie diáfana que forma el salón. Los espacios servidores se formalizan mediante radios de giro y círculos inscritos, a modo de lunares en el rectángulo capaz.

La climatización pasiva determina el resto de elementos. En un entorno donde las proporciones de lo doméstico y lo rural se enlazan y dominan el paisaje, la escala juega un papel importante: comedida en el acceso desde la calle, formado por un patio cerrado semicubierto, creciente hacia el espacio rural y abierto. Para que la climatización pasiva funcione de manera eficiente se controlan tres factores: iluminación, ventilación y temperatura, que se autorregulan durante todo el año:

- La iluminación queda garantizada a través de la fachada sur, totalmente acristalada, y con la entreplanta reflectante que permiten que la luz invernal alcance el fondo del edificio. Se disponen pequeños huecos de iluminación en la cara norte de modo que el contraste lumínico entre una cara y otra no deslumbre a los ocupantes.

- La ventilación se resuelve mediante una serie de aberturas en la parte inferior de la fachada norte que permiten que penetre el aire fresco del patio, ocupado por agua y vegetación.

- La temperatura queda resuelta mediante el siguiente mecanismo: en invierno, el mayor ángulo cenital de los rayos solares hace que estos pasen a través del vidrio de la cara sur e incidan en el suelo del edificio formado por un material con gran inercia térmica, que se encarga de repartirlo durante el resto del día. El aislamiento del edificio hace que el calor acumulado no se radie al exterior más frío. En verano el sol no penetra significativamente dentro del edificio, gracias al aislamiento de fachadas y cubierta, y a la disposición de vuelos y parasoles.

La cubierta inclinada funciona como un muro parietodinámico: en verano, debido a su configuración y al ángulo de incidencia de los rayos solares sobre ella, la diferencia de temperatura entre su cámara de aire ventilada y el interior del edificio es muy importante, por lo que, mediante el efecto termosifón, se genera una diferencia de presión que hace pasar aire del patio norte hacia el edificio y del edificio al exterior por los tubos de ventilación, consiguiendo bajar la temperatura.

Este efecto en invierno no se produce debido a la inclinación de la cubierta, que minimiza la incidencia de los rayos solares sobre ella, por lo que apenas se calienta. Con todo ello se consigue un espacio representativo y funcional que permite una utilización racional de los recursos disponibles, muy limitados en ayuntamientos pequeños.